En el día de hoy, los/as catequistas de Salle Joven y Catequesis de Iniciación del centro han recibido la bendición para afrontar la noble tarea de sembrar la fe en los corazones de los/as catecúmenos/as de nuestro colegio.
Aunque todos los domingos nos reunamos en torno al altar para celebrar el misterio de la muerte y resurrección de Jesús, en este domingo queremos que reflexionar sobre la misión nuclear de nuestra comunidad: la catequesis.
La catequesis se entronca con la misión de Jesús de Nazaret: anunciar la Buena Noticia y que transmitió después a sus discípulos: “Id por todo el mundo y proclamad la Buena Noticia a toda criatura. El que crea y se bautice, se salvará, pero el que no crea, se condenará”.
Durante el curso nuestros niños y niñas, jóvenes y adultos, van a ser acompañados en el proceso de profundización en la fe que recibieron y que profesan. Los catequistas desempeñan esta tarea, propia de la Iglesia y en nombre de nuestra comunidad.
Desde aquí les damos las GRACIAS por la enorme labor que realizan de manera generosa, atenta y desinteresada.
