Comenzamos el tiempo Pascual en el que celebramos el acontecimiento más importante para los/as cristianos/as, el que da sentido a nuestra FE. Es tan importante que un solo día no nos alcanza para celebrarlo, por eso la Iglesia lo festeja a lo largo de cincuenta días. Festejar, celebrar, conmemorar… todos ellos conceptos que hacen brotar en nosotros sentimientos de alegría, emoción, inquietud y gozo. Y es que Cristo, aquel que todos creían muerto, ¡HA RESUCITADO! Esta es la alegría del cristiano/a.
Sabedores de esta gran noticia, no podemos permanecer quietos/as. En un mundo en el que la televisión, la radio y las redes sociales nos bombardean a diario con noticias que nos muestran realidades muy dispares pero que, en su mayoría reflejan desesperanza, pobreza y miseria… ¿cómo permanecer de brazos caídos?
¿Cómo esconder este gran regalo al resto del mundo? Seamos portadores/as de esta gran noticia y ELIJAMOS DAR y CONTAGIAR VIDA a tantos corazones apagados, que vagan sin sentido y que no encuentran razón de ser a una vida, sin esperanza. Pongamos toda nuestra fuerza en esta gran tarea y dejémonos mover por la fuerza del Espíritu.
Salgamos a las calles y las plazas (y las clases, y los patios…) y gritemos con inmensa alegría que ¡Cristo verdaderamente ha resucitado!
Dos son las palabras claves que se abrazan y repiten a lo largo de estos cincuenta días de PASCUA, contagiar y dar, que siempre van ligadas a un don mayúsculo, la “VIDA”. Por eso, en la línea del lema de este curso, nuestro lema de Pascua será: ¡ELIGE LA VIDA!
En el cartel aparece Jesús Resucitado tras el lema, rodeado de muchas mariposas, que simbolizan a todos/as los/as que gracias a los esfuerzos por volar, logramos convertirnos después de la Cuaresma. Y sujetando un gran corazón a modo de trofeo, porque la VIDA vivida con AMOR es el mejor premio que podemos recibir.
Además, vuelve a aparecer la mariposa que conocimos en Cuaresma, para que comprendamos la continuidad que existe entre los dos Tiempos Litúrgicos. La Cuaresma nos prepara para la GRAN FIESTA DE LA PASCUA.
