Si hablamos de uno de los miedos más comunes de los alumnos/as dentro del aula, ese es hablar en público. Muchos/as niños/as se tensan cuando el profesor dice “Fulanito, sal a leer” y, aunque trabajemos el mundo de las emociones, esta es una destreza que se debe enseñar a parte.
La oratoria escolar desempeña un papel fundamental en el desarrollo integral del alumnado, ya que fomenta la habilidad de expresarse con claridad y seguridad. A través de la práctica de la oratoria, los estudiantes no solo aprenden a comunicar sus ideas de manera productiva, sino que también fortalecen su autoestima y confianza en sí mismos. Esta destreza es esencial en un mundo donde la capacidad de influir y persuadir se vuelve cada vez más valiosa.
Uno de los valores en los que más hay que insistir es en el respeto. Respeto hacia las opiniones de los demás, así como tener templanza si no se está de acuerdo en algo.
Además, trabajar la oratoria desde edades tempranas estimula el pensamiento crítico y creativo, habilidades que son claves para el aprendizaje y la resolución de problemas. Los/as estudiantes que participan en actividades de oratoria tienen la oportunidad de analizar diferentes perspectivas y desarrollar argumentos sólidos, lo que les prepara para enfrentar complicaciones académicos y profesionales en el futuro. En resumen, la oratoria no solo enriquece su vida escolar, sino que también les brinda herramientas útiles para su desarrollo personal y social. Esta destreza es esencial en un mundo donde la capacidad de influir y persuadir se vuelve cada vez más valiosa.
Por todos estos motivos y como parte de la asignatura de Oratoria, esta semana, La Salle San Francisco (Sanlúcar de Barrameda) realizará la Primera Liga de Debates con alumnos/as de Secundaria de otros centros educativos. Esta actividad pertenece a la asignatura de Oratoria. Como decía Cicerón “la oratoria es el arte de vestir las ideas”